YACIRETÁ 3*
¿Qué tal? ¿Cómo le va? ¿Cómo está usted? ¿Bien? ¿Cómo estás vos? ¿Bien? ¿Bien en serio? “Siempre hablando usted muy de cosas raras”. Estamos muy acuíferos últimamente. Claro, porque aguas arriba de Yaciretá, está Itaipú. Itaipú y Yaciretá son empresas, emprendimientos binacionales. Represas binacionales- Itaipú: Paraguay-Brasil. Yaciretá: Paraguay-Argentina. Y hay un personaje muy nefasto en esta historia, y este personaje se llama Alfredo Stroessner.
Stroessner hizo todo lo posible para clavar al Uruguay. No por nada, cuando lo echaron del poder, cuando lo sacaron a patadas del poder, lo tendría que haber sido unos años antes, pero tenía un entramado de poder para aguantar todo, fue a vivir a Brasil, y murió en Brasil. Brasil supo ser generoso con quien había cedido tanto, con tan poca vergüenza por no defender los intereses de su país. Ese señor, para sintetizárselo y que le quede claro, la bestia de Itaipú, esa represa, la más grande del mundo, que tenía 12.000 megavatios ampéres de potencia, y ahora, llevándolo a su máxiuma cota, tiene 14.000 megavatios ampéres de potencia, es decir 10 Chocones juntos, dejó para su país una turbina, y el resto para que las manejara Brasil como se le cantara. Es decir que absolutamente la obra fue para beneficio de Brasil. El actual gobierno paraguayo de Lugo, con todas su dificultades, peleando contra un gigante, intenta reparar tanto lo que se hizo en Yaciretá como lo que se hizo en Itaipú.
En general los intereses paraguayos fueron muy, pero muy ninguneados, muy, pero muy vilipendiados, como si no tuvieran nada. Se decía, se soñaba, que Paraguay fuera el Kuwait hídrico de América Latina y del mundo, con un potencial monstruoso, que si hubiera repartido no un 50 y 50, 70 y 30, hubiera dado una historia totalmente distinta al Paraguay. No la dio. Stroessner tiene una mano negra, Stroessner, el Partico Colorado, la trama de poder, los gobiernos militares. Todo ese conjunto es culpable de este lastre, así como está, de este lastre de la falta de salida del mar a Bolivia. De este lastre de un país condenado a la pobreza, cuando no digo que tendría que ser rico, pero que tendría que tener recursos holgados para tener un desarrollo digno.
Se han perdido más de 20 años, bastante más, te diría que más de 30. Y ahí está Paraguay penando, y es hora que que esa pena se transforme en un mínimo de dignidad. Brasil y Argentina tienen la palabra. Si tienen algo de dignidad ambas (estoy hablando de mi propio país a quien amo profundamente), si tenemos algo de dignidad, algo de reparación hay que hacer en forma urgente y debida. Los juegos de piratas se llaman pan para hoy y hambre para mañana. Mucho antes que mañana. Más de lo usted crea.
*Este micro fue transmitido cuando todavía estaba el presidente Lugo a cargo del gobierno paraguayo..