VICARÍA DE BELGRANO
¿Qué tal? ¿Cómo le va? ¿Cómo está usted? ¿Bien? ¿Cómo andás vos? ¿Bien? Bueno, pero me alegro, mucho, mucho. Bien. Hay cosas mágicas en la vida. Y una es rememorar en el tiempo cosas que uno ha visto, y en el momento las valorizaba, pero no se daba cuenta de todo lo que significaban.
La Iglesia Católica de la Capital Federal está dividida en un arzobispado, que es la entidad madre, y cuatro vicaría, que serían como las actuales comunas. Más que comunas serían como departamentos, y después vienen las comunas. Bien. Belgrano, Flores, Devoto, Centro. La cuatro vicarías. Esas vicarías las crea nada más ni nada menos que Pablo VI, Giovanni Montini. Todas tuvieron gran validez, todas tuvieron gente muy capaz, pero la Vicaría de Belgrano, que uno tendría que suponer que era una de nenitos de nariz arada, había una serie de gente realmente notable.
Marcelo Mitchell, el Padre Ricardo Larken, el Padre José McKinon, Zulma Luna, los hermanos Díaz…gente que tenía una capacidad de análisis, una capacidad de crítica, Emilio Neira, los Padres Palotinos…gente que tenía una capacidad de compromiso, de donación, de resolver los problemas, de ir al toro, de no esquivar el bulto, realmente notable. Pero insistimos también, de una gran capacidad de análisis. De no sentirse ni los mejores, ni los peores. De no sentirse ni más que nadie, ni tampoco porque sí menos que ninguno.
La Vicaria de Belgrano, allá por los 60 y 70 fue una auténtica joya. Y eso demuestra que el ligar no es el punto. Es punto es cómo yo me comprometo, cómo yo analizo, cómo yo voy distinguiendo, cómo yo voy metiéndome en la historia de mi país, de mi pueblo, de mi patria, de ,mi sociedad, de mis pequeñas comunidades. A toda esa gente. Zulma Luna, Marcelo Mitchell, José Ignacio Barassi… tantas, tanta gente. Hay más. Los Díaz, los Padres Palotinos que ya no están. Monseñor Leaden, hermano de los sacerdotes Palotinos asesinados. Realmente quería homenajearlos hoy.
Y quería que te quedara sólo ese nombre: Vicaría de Belgrano, Pastoral Juvenil. Quizás en el Padre José McKinon, un tipo grande, el espíritu de un joven en un hombre grande, para empujar con los jóvenes, y para saber poner el punto justo para poder tener la medida de lo que hay que hacer en momentos en los que la Patria…
Venía el golpe militar, habían pasado las Tres A y había que ser muy equilibrado, muy serio, muy comprometido, y él daba la nota justa. Es un nombre. Son muchos más. Valió la pena recordarlos. Vicaría de Belgrano, Pastoral Juvenil. Un momento mágico en la historia del compromiso por los otros. En este caso, de la Iglesia Católica. Pero pudieron ser cualquier otro grupo. Queríamos destacar esto. Otro día te paso a contar…otro relato.
